El Parque Natural de Redes, en Asturias, tiene una oferta medioambiental, cultural y de actividades con multitud de rutas de senderismo de diferente grado de dificultad donde toda la familia puede ponerse en contacto con la naturaleza y disfrutar de un día en la montaña. Hoy os quiero hablar de la ruta desde Caleao hacia el valle de Xulió. ¿Me acompañáis? Recoge tu Mochila de Cromo porque comenzamos… ¡ya!

Siempre algo para hacer

Es lo que os digo, el Parque Natural de Redes, Reserva de la Biosfera, tiene una amplia oferta de actividades, rutas, patrimonio, lugares con encanto y buenos restaurantes que hacen que sea el lugar perfecto para una escapada de fin de semana.

Reconozco que este entorno, perteneciente a la Mancomunidad Valle del Nalón, me tiene atrapado desde hace años. Los que me seguís desde los inicios sabéis que ya os he recomendado algunas rutas por la zona, como la de la subida a la Vega de Brañagallones (con un refugio donde pernoctar o tomar un refresco como recompensa) así como la idílica ruta del Tabayón del Mongallu, con su espectacular cascada.

Desde Caleao, punto de partida de esta ruta, sale una de las más conocidas del Parque y de toda Asturias: la ruta del Desfiladero de los Arrudos. En este caso, no dejaremos el coche junto al área recreativa (y nuevo camping) sino que debemos dirigirnos hasta el centro del pueblo. Aquí, en una pequeña plazoleta frente al hotel Casa Zulima, podemos dejar nuestro vehículo y calzarnos las botas… ¡comienza la ruta!

¡Vamos a ello!

La ruta está perfectamente señalizada en todo momento, y no tiene pérdida. Siguiendo el arroyo de Caleao, dejaremos una casa a la izquierda y, justo detrás de ella, nos enfocamos hacia el bosque tras cruzar un puente. Desde aquí, entre castaños y hayas, llegaremos bordeando el monte, hasta la zona que nos conduce, en leve subida, hacia la majada de Xulió.

Es esta una zona donde es posible escuchar la berrea durante los meses del otoño, si hay suerte y siempre que se vaya a primera hora de la mañana o de la tarde. Además, desde la propia majada, puedes tomar dos alternativas que te dirijan hacia el pico Cabeza L’Arcu (1598 metros) o hacia el Retriñón (1862 metros).

Esta ruta, que se engloba en la PR.-124, ha sido escenario de varias pruebas de trail en los últimos años.

Cruzamos el río…

Después de aproximadamente kilómetro, kilómetro y medio, desde la salida de Caleao debemos cruzar el arroyo Xulió que baja desde la propia braña. Ahora, en el lado izquierdo, vemos a nuestra derecha la frondosidad de los bosques de hayas que, en otoño, convergen en una sinfonía de colores que estaríamos observando horas y horas, aunque ¡debemos continuar!

Existe una desviación, a mitad de la ruta, que te dirige hacia la majada de Pandefresno. Nosotros, en una de las ocasiones que realizamos la ruta (sí, hemos ido en total tres veces), probamos a tomar ese camino y, aunque la zona es bonita, tampoco tiene mucho para hacer más allá que descansar y admirar la frondosidad del hayedo que nos rodea.

…y nos encontramos una casa bajo la piedra

¡Sí! Uno de los lugares más icónicos de la ruta es la zona de La Porqueriza, una cabaña levantada apoyándose en la piedra que, sin duda, volverá inmortalizada en vuestro móvil. Tras dejar atrás este pequeño refugio ganadero, continuamos ya con una leve subida hacia lo que será el comienzo de la majada. Es este quizás el punto más cansado pero la recompensa merece la pena… ¡estamos en Xulió!

Toca la parada para el pic-nic

Podéis hacerlo aquí o bien en lo alto de la majada de L’Arcu, a los pies de la cima. En nuestro caso, siempre hacemos una breve parada aquí ya que hay varias cabañas, muy bien conservadas, donde puedes sentarte y disfrutar del paisaje y los sonidos del bosque, como el piar de los pájaros o el murmullo del arroyo.

El entorno parece sacado de Parque Jurásico, y la belleza es, sin duda, indescriptible. Desde la braña podemos continuar hacia la collada de L’Arcu, continuando sin pérdida el sendero. Una vez en la parte superior, con el pico L’Arcu mirándonos desafiante, tenemos tres opciones: hacer cumbre en el pico, continuar ladera abajo hacia los Arrudos o, simplemente, retroceder.

La ruta en sí es circular y si tenéis tiempo y buena forma física, os animo a continuar. Es cierto que la ladera que baja hacia los Arrudos no está tan cuidada como la otra, la que viene de Caleao, pero siguiendo el sendero entre los helechos y guiándonos un poco por las propias cabañas, lleva sin mayor problema hacia el desfiladero. Es una parte sombría, eso sí, y debemos tener cuidado con los resbalones producidos por la humedad y el propio barro.

Una vez conectamos con Los Arrudos, los más valientes pueden intentar culminar esta ruta hacia la Fuentona o, sino, descender por la ancha pista hasta el pueblo de Caleao (en realidad, llegaremos hasta el área recreativa y el nuevo camping, donde reponer fuerzas).

Como veis, la ruta del valle de Xulió es apta para todos los públicos y, en sí misma, tiene diferentes opciones de dificultad. En todo momento podréis disfrutar del interior del hayedo, con un ambiente húmedo y refrescante en verano, y sacado de una película en los meses más fríos. Como os dije al comienzo, es una zona perfecta para oír (y ver, si tenéis suerte) la berrea de los ciervos a finales de septiembre o principios de octubre y, a pesar de no ser una de las rutas más conocidas del parque, las vistas desde la collada de L’Arcu o el propio pico son, sin duda, un placer para nuestros sentidos.

¿Conocías esta ruta en Redes? ¿habéis estado ya por la zona? ¿necesitas alguna sugerencia o recomendación sobre el Parque? No dudes en ponerte en contacto conmigo a través del apartado Comentarios que encontrarás abajo.

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