Por fin se acaba este 2020. Ha sido un año extraño, con momentos difíciles pero situaciones que han permitido darnos cuenta de que las cosas son fugaces y que debemos estar agradecidos por lo que tenemos, nuestra familia y amigos. En esta última entrada del año, me gustaría compartir con todxs vosotrxs las doce entradas, una por cada mes, más leídas en este 2020 y, de esta forma, recordad juntos los buenos momentos vividos. ¿Me acompañas?

Enero: Año Nuevo en Viena

Comenzamos el año de la mejor manera posible: recordando parte de nuestro viaje a Viena. La capital austríaca, Meca de la cultura europea, fue el escenario escogido para disfrutar del concierto de Año Nuevo en el reconocido Musikverein. Es este espacio donde, a lo largo del año, se organizan diferentes recitales a precios bastante low-cost ya que, si no te importa estar de pie durante toda la función, puedes vivir la experiencia desde tan sólo 5€. ¡Un auténtico chollo!

Si quisieras saber cómo fue mi experiencia y cómo conseguir estas entradas tan baratas, no te pierdas mi entrada sobre el Concierto de Año Nuevo en Viena.

Febrero: Oviedo y el monte Floyen

Sin duda, esta ha sido una de las entradas más compartidas y leídas en 2020. En ella os plasmo mi idea de cómo debería recuperarse el monte Naranco, en Oviedo, siguiendo el modelo del monte Floyen, en Bergen, la capital de los fiordos noruegos.

En esta columna, os cuento algunos aspectos que, casi un año después, han comenzado a ponerse en marcha. Quizás el confinamiento, y por tanto, el redescubrimiento de este pulmón verde ovetense, han servido para ponerlo en valor y otorgarle el protagonismo que merece. ¿Quieres conocer mi opinión? Haz click en Oviedo y el monte Floyen.

Marzo: Lechería La Popular, en Laciana

Una de nuestras colaboraciones este año, y que ha tenido un gran impacto (con más de 2000 visitas) han permitido que os descubra esta joya escondida en el valle de Laciana, en plena montaña leonesa. Angélica y Magali han sabido dinamizar este recurso del valle, potenciándolo al máximo nivel y, desde hace muy poco, hasta podéis comprar manteca de la propia lechería, como la de antaño, en su web. Un imprescindible que os muestro aquí.

Abril: Cabo de Peñas

En el punto más difícil de la pandemia, con todo el desconocimiento y, por qué no decirlo, miedo que teníamos, las visitas al blog disminuyeron de manera notable, rompiendo la tendencia al alza que habíamos conseguido en los últimos meses. Eso no fue excusa para que, gracias al blog, os quisiéramos hacer viajar a través de los textos y fotografías.

Y nada más relajante, mágico e hipnotizante como el Cabo Peñas; lugar magnífico, a veces no tan conocido por los propios asturianos aunque, todos, hemos visto la luz cegadora de su faro en las calurosas noches de verano. ¿Aún no has leído la entrada? No te pierdas todo lo que puedes descubrir en el entorno del Cabo Peñas.

Mayo: Les Praeres, en Nava

Otro punto que cada día gana más adeptos es el entorno de Les Praeres. La mascota del lugar, una adorable cierva, así como la cabaña-restaurante donde se sirven comidas riquísimas y a buen precio, con la sierra de Peñamayor como telón de fondo, han hecho que este lugar haya alcanzado fama a nivel local, así como a nivel nacional.

Si quieres descubrir lugares menos conocido de nuestro entorno y, además, saber cómo se come en el bar de Les Praeres, no puedes perderte mi entrada aquí.

Junio: el valle de Xulió, en Redes

El Parque Natural de Redes es mucho más que queso Casín, la ruta del Alba o los Arrudos (aunque también os he hablado de esta ruta en el blog). Existen numerosas rutas, de diferente dificultad, que parten del bucólico pueblo de Caleao.

Rodeados de abundantes bosques caducifolios, donde destacan los castaños, avellanos y robles, es este un lugar mágico, perfecto para avistar (o al menos oír) la berrea con las primeras lluvias de septiembre. Si quieres transportarte a lugares de cuento, no te pierdas la entrada del valle de Xulió desde Caleao aquí.

Julio: embalse de Grandas de Salime

Aunque la entrada se publicó a principios de año, no fue hasta el verano cuando más la habéis leído, convirtiéndose en lo más leído del mes. En el post, os hablo del entorno del embalse, gran desconocido para la mayoría de los asturianos y que guarda grandes sorpresas, así sobre cómo se construyó esta faraónica obra de ingeniería.

¿Un secreto? Desde la presa, impresiona admirar el enorme salto de más de cien metros. ¿Te atreves a leerlo? Haz click aquí.

Agosto: planes a media hora de Oviedo

Si tenemos que estar agradecidos de algún mes, es de este: Agosto se ha convertido en el mes con más visitas de todo el año y, por primera vez desde que comencé esta aventura, superamos las diez mil visitas brutas en un único mes. Solo por eso: gracias.

La entrada que ha ayudado a este logro ha sido precisamente la de cinco planes a media hora, o menos, de Oviedo. La escribí porque muchas veces, los propios bloggers, hablamos de los mismos lugares y eventos, pero con diferentes puntos de vista. Ya se ha hablado de lo bonita que es Oviedo, y de las posibilidades que tiene pero, en este caso, quería dar protagonismo a su entorno. Si tu también quieres conocer esos cinco tesoros escondidos, solo debes hacer click aquí.

Septiembre: de guaje a orbayu

Coincidiendo con el Día de Asturias, desde el blog lanzamos este post para todos aquellos que nos visitan y que nos miran raro cuando hablamos en nuestro dialecto. Sin entrar en polémicas, para propios y foriatos, esta entrada ha sido la más leída del mes de septiembre.

¡Ah! ¿Qué no sabes lo que quiere decir foriatu? ¿ni orbayu? Pues corre, corre, descúbrelo aquí.

Octubre: el Balneario de La Hermida

Otra de las colaboraciones realizadas este 2020 ha sido la del Balneario de La Hermida. En un año tan catastrófico para muchos sectores, con especial importancia en hostelería, quisimos aportar nuestro granito de arena de la mejor forma que sabemos, contándoos nuestra experiencia con el máximo rigor y sinceridad.

Sobran las palabras. Este balneario debería ser conocido por todos aquellos amantes del bienestar, de los pequeños detalles y del trato exquisito. Una joya enclavada en pleno desfiladero de La Hermida, muy cerca de Liébana, y con multitud de atractivos en sus alrededores. ¿Quieres sumergirte en su manantial y deshacerte de las preocupaciones de este 2020? Pues descubre nuestra entrada sobre el Balneario de La Hermida.

Noviembre: los dulces de Cabo Busto

A las puertas de 2021, una de las entradas más dulces de este 2020 ha sido la de Cabo Busto y su entorno, con especial protagonismo de la pastelería del mismo nombre y que, si bien ya era un referente en el mundo de la repostería, este 2020 ha servido para que muchos, yo el primero, nos acercásemos a conocer las creaciones de Jonhatan y su equipazo. Gusto, buen hacer y creaciones únicas a precios más que populares. Y encima, con un área recreativa preciosa a escaso kilómetro del pueblo, con vistas vertiginosas al Cantábrico. ¿Necesitas más información? Pues echa un vistazo a nuestra experiencia aquí.

Diciembre: Navidad en Oviedo

El último mes del año es el mes de la ilusión, la fantasía, la generosidad y la empatía (aunque esto debería ser todos los días del año). Quizás la atmósfera y ambiente que inundan las calles de las ciudades hace que todos saquemos nuestra mejor versión.

Oviedo, en los últimos años, ha sabido sacarle partido a la iluminación navideña. En un año en que es cierto que debemos disfrutar con responsabilidad, la ciudad se muestra como una clara competidora a las grandes capitales navideñas (entre las que tenemos varias españolas, como Vigo o Madrid). Sin duda, un paseo por el centro y El Antiguo es un plan perfecto para disfrutar en familia. Pero lo dicho, si queremos que el próximo año las Navidades vuelvan a ser las de siempre, debemos actuar con responsabilidad, protegiendo y protegiéndonos. ¿Quieres dar un paseo virtual por Oviedo en plena Navidad? No esperes más y haz click aquí.

Y con esto, llegamos al final de un año que, sin duda, quedará marcado en nuestra memoria. Pérdidas muy dolorosas, miedo, incertidumbre, inestabilidad, sueños incumplidos… todos sabemos lo que hemos pasado, y no es necesario recordarlo. Desde mi punto de vista, era necesario parar el ritmo (aunque, por supuesto, no a este precio) pero sí detenernos un poco, y ganar tiempo al tiempo. Apreciar una reunión con nuestros familiares, esas cenas de amigos, los paseos por la playa, horas y horas hablando sin hablar de nada, las cervezas con los compañeros de empresa… ¡hasta el cuñado que se sienta en la mesa por Navidad! ¿Verdad que lo echamos de menos?

Pero el 2021 está por llegar. En 2020 nos ha tocado ser responsables, pero 2021 será el año para disfrutar de estos sacrificios. Los grandes avances en materia de vacunación, imprescindible para minimizar los efectos en las poblaciones más desprotegidas, así como la búsqueda de medicamentos que consigan devolvernos nuestra habitual rutina, marcarán el final de un túnel que nadie creía que viviría.

El otro día escuchaba un consejo que me pareció maravilloso: en la próxima reunión o cena, comida o Reyes, en un momento determinado y sin previo aviso, di te quiero, a quien sea. Papá, te quiero; abuela, te quiero; hermano, te quiero. Veréis como se desarrolla un torbellino de emociones donde las risas (y la normalidad) volverán. Igual que los viajes y aventuras, que volverán.

Por todas esas sonrisas que están escondidas bajo las mascarillas, feliz 2021.