En los altos acantilados del cañón del Sil nos encontramos con una de las bodegas más impresionantes de la Denominación de Origen Ribeira Sacra: Regina Viarum. El camino de los buenos caldos, panorámicas impresionantes y arquitectura sofisticada parece confluir en esta bodega en la vertiente lucense de la Ribeira Sacra. ¿Quieres conocer nuestra experiencia? Recoge tu Mochila de Cromo porque comenzamos… ¡ya!
No es la primera vez que visitamos la Ribeira Sacra ya que, en el puente de Todos los Santos, pudimos disfrutar de los paisajes de este lugar idílico, donde las nieblas en el cañón del Sil parecían abrazar las vides de llamativos tonos rojizos. Pero la falta de tiempo hizo que nos quedase pendiente profundizar más en algo tan importante para esta zona como es la viticultura heroica. De ahí que, en esta ocasión, decidiéramos visitar las bodegas Regina Viarum.
Bodegas en un entorno de ensueño
Ubicadas en Doade, en la parte lucense de la Ribeira Sacra, la finca y terrenos de Regina Viarum son, cuanto menos, espectaculares. Ubicados en lo alto de una loma, las bodegas pueden verse desde cualquier punto, así como sus característicos cipreses, que bien podrían recordarnos a una villa mediterránea.
Si vienes desde Lugo sólo debes acercarte a Monforte de Lemos y, desde ahí, tomar la carretera que te llevará hasta Castro Caldelas – Doade. Es una carretera amplia, con posibilidad de desviarse hacia algún mirador de la que bajas, y sin apenas tráfico. Si vienes desde Ourense, debes dirigirte hacia Castro Caldelas (carretera en buen estado) y pasar el puente que salva el Sil como frontera natural entre las provincias de Ourense y Lugo. Subiendo por el desfiladero, mientras contemplas las terrazas con los viñedos a ambos lados de la carretera, te toparás con la bodega metros antes del cartel de entrada a Doade. ¡No tiene pérdida!
Comenzamos la visita
Tras reservar en su web, aparcamos en el amplio parking exterior (parte está con techo) y disfrutamos de unos minutos previos por sus jardines, contemplando el paisaje, el cañón y haciéndonos alguna foto. A la hora indicada, nos esperaba nuestra guía Manuela, para comenzar la visita.
Aunque la visita es de tan sólo una hora, es sumamente didáctica y amena. Comenzamos en la parte baja de la bodega, tras hacer uso del gel hidroalcohólico, introduciéndonos en una sala a media luz donde Manuela se presenta y nos indica las características más importantes del lugar donde nos encontramos y el por qué del nombre de la empresa o por qué se cultivan vides en esta parte de Galicia. No vengáis buscando pulpo, marisco y playas de arena fina, Galicia es eso y mucho más, como así lo demuestra la zona de la Ribeira Sacra.
Desde esta sala, accedemos a la parte alta donde se proyecta un vídeo explicando el proceso de la viticultura heroica. No es este un apodo baladí que se autoproclamen los recolectores: desniveles de infarto, pendientes de más de 45º, un trabajo tedioso y pesado hacen que, aquellos (y aquellas) que recolectan la uva tengan el honor de ser considerados héroes. Y si os preguntáis, como yo, si ha habido graves accidentes, Manuela os contestará risueñamente que no, que apenas algún esguince. ¡Algo tienen estos gallegos que hacen que sean tan duros!
Visita a la sala de fermentación y barriles
Tras disfrutar del video, accedemos a la sala de fermentación donde los enormes tanques de acero inoxidable son el lugar perfecto para la fermentación y creación de los caldos de Regina Viarum. Sin entrar en demasiados datos técnicos sobre el proceso de producción, ya que os invito a que lo descubráis por vuestra cuenta, comentaros que el tratamiento que se le hace pasado unos meses permite que se disipe todo el dióxido de carbono de los vinos, evitando que así se pierda.
Después de tomar alguna foto, nos acercamos a la zona de barricas, previa a la sala de degustación. Aquí están los mejores vinos, cuidados con esmero y con fermentación en barrica, lo que les permite adquirir unas tonalidades y gusto que nos permiten hablar de caldos carnosos.
Y llegó la cata
En una sala acristalada, con luces cálidas y con espectaculares vistas tanto a los viñedos como al Sil, Manuela nos prepara lo que será nuestra cata. Hemos tenido la suerte de hacer esta visita totalmente privada (no ha sido una colaboración) dada la fecha y la hora, por lo que Manuela se ha implicado al máximo para personalizarnos la experiencia.
De las diferentes visitas con catas disponibles, podréis escoger entre la mas sencilla (visita + 2 vinos a degustar, a un precio de 7€), la intermedia (con tres vinos y a 9€; nosotros escogimos esta) y la experiencia completa que comprende hasta cinco caldos diferentes. Depende de vosotros cuál se puede ajustar más a vuestras necesidades e interés.
Reconozco que soy un pleno ignorante de los vinos pero la degustación que nos ofreció Manuela cumplió, con creces, mis expectativas. Comenzamos con un vino blanco que estaba realmente bueno, con toques a manzana y que podría evocar, quizás, al sabor de la sidra asturiana. Fresco, alegre y algo balsámico. Continuamos hacía los vinos tintos, algo más astringentes, es decir, la cantidad de taninos hace que se aprecie un estrechamiento en el paladar al beber este tipo de vinos.
Tras la charla informal, dada la cercanía de Manuela, así como su enorme conocimiento, se nos invitó a disfrutar de la copa en la terraza-mirador. Tuvimos suerte ya que, con el día soleado, la atmósfera, el ambiente… bien podríamos decir que estábamos en la Toscana. ¿No será acaso la Ribeira Sacra la Toscana gallega?
Sin duda, la visita guiada a las bodegas Regina Viarum es una experiencia imprescindible en vuestra visita por la Ribeira Sacra. Amena, profesional, didáctica y con una cata donde hasta los menos entendidos, como yo, pueden apreciar los matices de los diferentes vinos, haciéndose una idea de la variedad, riqueza y calidad de los caldos de la Ribeira Sacra. No es la historia de las bodegas una historia de grandes leyendas e historias que rozan el misticismo; no, en bodega Regina Viarum se esfuerzan por hacer el mejor vino de toda la Ribeira Sacra. Os animo a que reservéis una visita, y si habéis estado, o conocéis la bodega, os invito a dejarlo en nuestro apartado Comentarios, que encontrarás más abajo.
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