El otro día os pedía por redes sociales si alguien tenía algún descuento de 15€ en el programa de fidelización de Booking para mis próximos viajes. Como algunos sabréis, desde este propio blog podríais reservar en la web de Booking.com y ahorraros 15€ que se devuelven en el momento de hacer el check-out- ¿Ha funcionado realmente? ¿Es todo una estafa? ¿Qué está pasando ahora con esos códigos de descuento? Recoge tu Mochila de Cromo porque comenzamos… ¡ya!

Bueno, pues vamos a abrir este melón. Por todos es conocido que en el mundo blogger hay un punto que, gracias a tu blog y tu servicio de comunicación comienzas a utilizar webs cuya finalidad es obtener un programa de afiliación y tú, a cambio, recibes una pequeña recompensa con la propia empresa o, directamente, dinero en efectivo.

Existen cientos de páginas con programas de afiliación aunque en el mundo de los travel bloggers se suele trabajar con seguros especializados, webs de experiencias y, obviamente, alojamientos. Otros bloggers, más especializados, o con audiencias mayores, colaboran directamente con importantes cadenas hoteleras, servicios turísticos y oficinas nacionales de turismo. ¿Créeis que nuestra Mochila llegará a esos niveles?

Conociendo el mundo gracias a las ofertas de Booking.com

Sin duda alguna, Booking.com, al igual que lo hizo Ryanair con los vuelos, ha liberizado el mundo de los alojamientos. A pesar de comenzar como una web donde encontrar en un mismo sitio hoteles y hostales a precios ajustados, pronto se ha desarrollado como un portal para todo tipo de viajeros y, sobre todo, para cualquier tipo de presupuesto. Así, dada la fuerte competencia actual en el mundo de los alojamientos, Booking.com se ha planteado ofrecer un valor añadido a los típicos hoteles, con la posibilidad de reservar noches en alojamientos como apartamentos, pensiones, hostels y hasta barcos atracados en puerto. Sin duda, esta ventana permite ampliarse hacia un público que no creía que esta web fuera para ellos.

Con Booking.com son todos ventajas, ¿hasta ahora?

Además, para los viajeros frecuentes como yo, existe un programa especial denominado Genius con el que, divididos en dos niveles (no sé porque nunca llegó a desarrollarse de una forma más convincente y amplia) puedes encontrar ofertas exclusivas y/o secretas, descuentos de hasta el 15% en alojamientos determinados y, según cuenta la leyenda, alojamientos que te ofrecían desayuno y upgrade gratuito. Después de varios viajes alrededor de Europa siempre confiando en ellos puedo decir que jamás he encontrado este tipo de exclusividades aunque sí buenas ofertas u ofertas secretas que, en perfiles sin Genius, no estaban activadas.

Pero lo que sí he podido comprobar es que, hasta hace poco, los precios en Booking.com eran los más competitivos del mercado y, si bien quizás no los más éticos, hacían que los viajes no se encareciesen demasiado. ¿Problema? Al final eran los alojamientos los que estaban atados de pies y manos ante una política muy restrictiva por parte de la empresa.

¿Y tú qué tienes que ver en todo esto?

Una vez el blog ha ido creciendo (de nuevo, gracias a tod@s vosotr@s) he decidido obtener un pequeño incentivo de alguna forma para pagar el hosting (dado que mis colaboraciones son gratuitas) y, si bien en aquel momento era muy difícil conseguir patrocinadores o colaboradores, lo cierto es que el programa de afiliación de Booking.com prometía que, por cada reserva que hicieseis utilizando mi código vosotros ganarías 15€ (que se os devolverían al realizar el check-out) y, por otro lado, a mi se me ingresarían otros 15€ en concepto de promoción.

No voy a negar que, durante un tiempo (sobre todo en la época veraniega) muchos de vosotros habéis hecho click en ese enlace que siempre os proporcionaba al final de mis posts y que, gracias a ello, he conseguido pagarme el hosting durante el presente año. Pero, hoy en día, todo eso ha desaparecido.

¿Y eso?

De la noche a la mañana, Booking.com decidió que dejaba de ofertar su programa de afiliación por lo que los códigos de descuentos proporcionados dejarían de ser útiles. Si bien eso supuso un parón importe para los débiles ingresos que tenía más lo fue el hecho de generar una incertidumbre sobre el dinero que ya había conseguido pero que estaba en el aire a la espera de comprobarse que todo estaba correcto y el proceso se había siguiendo sus términos y condiciones.

Así, tras un primer impacto pensé que el dinero pendiente sería poco a poco ingresado y que, si bien mi código dejaría de tener validez, no el hecho de haberse hechos ya reservas con él.

Pero no. Sin ningún tipo de notificación por parte de la empresa, Booking.com cortaba todo tipo de relación entre sus afiliados y el dinero que ya habíamos conseguido. De la noche a la mañana los sesenta euros que estaban pendientes de ingreso desaparecieron a pesar de tener reservas hechas que aún no habían realizado el check-out. En ese dinero se incluían, por ejemplo, las reservas para mis padres durante su viaje en Edimburgo.

Un día, cuando daba ya todo por perdido, debo reconocer que se me hizo un ingreso pediente de quince euros pero, repito, el resto del dinero ni está ni se le espera.

¿Es una estafa?

No, tampoco algo como una estafa… pero sí una actuación poco digna de una empresa como Booking.com. Ya no solo para el caso de bloggers, influencers y todo este mundillo sino para los propios clientes de a pie que veían en el código de descuento una forma amena, económica y sencilla de hacer reservas sabiendo que les saldría a un mejor precio. Quizás se nos ha pagado con la misma moneda que a los hosteleros y gerentes de hoteles: vivimos en un mercado muy comprometido y cualquier movimiento puede desajustar las ganacias o pérdidas de una empresa.

La verdad es que, gracias a esto, me he vuelto independiente de Booking.com. Por supuesto que sigo teniendo a su aplicación como referente a la hora de escoger hoteles, ya sea por opiniones o por fotografías y que, en un primer momento a la hora de organizar un viaje, lo utilizo como termómetro de precios, gangas y posibilidades en destino.

Si bien lo sigo utilizando para los viajes por Europa, he decidido dejarlo para los destinos nacionales. Es mucho más barato, ético y sencillo reservar de forma directa con el alojamiento donde, si bien el precio de la reserva puede ser el mismo, descubres que con la reserva directa sí que puedes tener upgrade en la habitación o desayuno gratuito incluido en tarifa.

¿Qué alternativa ofreces ahora? ¿tienes otro código de descuento?

¡Por supuesto! A rey puesto, rey muerto. Hoy en día trabajo con AirBnB donde, increíblemente, estoy encontrado alojamientos a buen precio en ciudades caras (como Madrid; es increíble lo caro que se ha vuelto todo en la capital española) y que, gracias a esta plataforma, puedes encontrar auténticos chollos si sois un grupo algo grande o, si por el contrario, preferís tener una vivienda para vosotros solos en destino.

Si bien es cierto que la opción de compartir vivienda no me convence, puedes encontrar auténticas gangas en el centro de las ciudades con un pequeño apartamento para vosotros solos. Si quieres probarlo, te dejo mi código descuento en la plataforma aquí. Si necesitas ayuda o no sabes cómo conseguir un apartamento al mejor precio, puedes hacérmelo saber a través del apartado Comentarios o bien, por mensaje privado en la pestaña contacto.

¿A vosotr@s Booking.com también os ha dejado tirad@s? ¿Conocéis otros programas de afiliación en los que haya ocurrido lo mismo? Nos leemos en Comentarios.

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