Icono del sitio Mochila de Cromo

Christiania, la ciudad libre en Copenhague, ¿drogas? ¿peligrosa? | OPINIÓN

Anuncios

Copenhague es, por méritos propios, una de las capitales europeas más bonitas, diferentes, liberales y abiertas. Todo tiene cabida en esta polis donde los palacios conviven sin inmutarse con edificios vanguardistas y donde la tranquilidad de los canales no se ve alterada por el ir y venir de bicicletas, incluso en los días más fríos. Aquí, y quizás como no podría ser de otra forma, se encuentra la ciudad libre de Christiania. ¿Hay algo más allá de drogas? ¿Es peligroso adentrarse en ella solos? ¿Sitio turístico? Recoge tu Mochila de Cromo porque comenzamos… ¡ya!

¿Qué es Christiania?

Ya lo decía Vetusta Morla con su canción Copenhague: “dejarse llevar, suena demasiado bien”. Este podría ser el lema de la ciudad libre de Christiania, un pequeño barrio alternativo y al margen de las leyes danesas (de ahí que se considere una ciudad libre) donde se combina la contracultura más extrema con drogas, arte callejero, puestos de comida saludable y un sinfín de actividades alrededor de un lago donde sus vecinos creen que pueden vivir sin todos los excesos del mundo occidental tal y como lo conocemos. Como si entrásemos en un ghetto de los 70, Christiania es una comuna donde todo el mundo es bien recibido siempre y cuando se respete el espíritu de la ciudad.

Fundada por el movimiento Provo, Christiania nació como un espacio para recuperar unos terrenos militares y donde los ciudadanos creían que tenían derecho a la libre explotación de los mismos. Christiania está, por tanto, no sólo al margen de Dinamarca sino también de la Unión Europea.

Debo reconocer que cuando fui a Christiania iba con una mezcla de sentimientos encontrados. Por un lado, era consciente, por lo que había leído, que la zona era un hervidero de drogas de distinta naturaleza camufladas bajo una bandera de espíritu libre y buenrollismo, donde todo estaba permitido. Por otro lado, como lo prohibido siempre llama más la atención, tenía curiosidad por saber qué era lo que se cocía en aquel espacio donde muchos salían fascinados y otros, los menos, horrorizados. ¿Sería en realidad una trampa turística inspirada en los coffee-shops holandeses?

Christiania se encuentra detrás de la Ópera de Copenhague

Pues bien, una de las primeras cosas que debes saber sobre Christiania es que, sí, hay drogas, muchas drogas aunque casi todo se basa en marihuana y poco más. De todas formas, si no estás interesado en este mundo, Christiania ofrece alternativas como exposiciones de pintura, puestecitos de comida callejera venida de todas las partes del mundo con una fuerte presencia de comida vegana y vegetariana, así como un agradable paseo a orillas del lago para toda la familia.

¿Es cierto que no se pueden tomar fotos?

Es cierto que debes preservar la intimidad del casi millar de habitantes de Christiania. Aunque es cierto que este barrio/ciudad convive al margen de Copenhague (la policía danesa hasta hace poco no podía entrar en este territorio), lo cierto es que muy poca gente vive dentro y hacen su vida fuera por lo que, los traficantes de hachís y marihuana pueden meterse en un lío si sus rostros aparecen en fotografías o vídeos ya que, fuera de Christiania, correrían con todo el peso de la ley danesa acerca de drogas y demás. Es por eso que, si bien puedes tomar fotografías de todo el barrio así como de sus coloridas calles, murales y rincones, la zona de la plazoleta donde encontrarás el “hipermercado” de drogas es una zona restringida en cuanto a vídeos y fotografías. Si no quieres tener problemas, o acabar con tu móvil roto, te recomiendo que respetes la intimidad de los comerciantes. Al fin y al cabo, llévate tú la sensación y el resto del mundo ya podrá ver con sus propios ojos qué es exactamente Christiania.

Y si os lo preguntáis, no, yo no hice ninguna foto durante mi visita (y eso que iba con la réflex).
De camino a Christiania (foto propia)

Pero, ¿es peligroso?

En absoluto. De nuevo, repito, depende de tu tolerancia y de si vas buscando pelea o movida con alguien. Si eres un simple turista que, por curiosidad, quiere conocer qué es la ciudad libre de Christiania, te recomiendo que te acerques sin ningún tipo de temor. De hecho recuerdo que, durante mi visita, había familias con niños pequeños e, incluso, carritos de bebé. Lo cierto es que la mayor parte de Christiania es una zona residencial, con edificios algo descuidados pero con algunos chalecitos que sorprenden por lo cuidados que están, con unas vistas preciosas hacia el lago y con unos bosques que invitan a relajarse y hacer un picnic.

Si bien es cierto que mi visita fue por la tarde, antes del anochecer, no creo que sea un lugar donde debas preocuparte demasiado por tu seguridad. Copenhague, y por tanto Christiania, (y al igual que la mitad de las ciudades escandinavas) es una ciudad absurdamente segura donde nunca pasa nada y, cuando ocurre, parece que se paraliza todo el país.

He visto que hay tours organizados

Sí, es cierto, pero estoy en contra de ellos. La verdad es que siempre que tengo oportunidad, me interesa conocer más de una ciudad o una zona a través de un tour y, más en realidad, si es con un free tour. En Copenhague hay cientos de free tours todos los días y, algunos, tienen como destino Christiania. De hecho, durante nuestro free tour por Copenhague, se nos invitó a participar en el de la tarde hacia Christiania. Pero, ¿por qué estoy en contra? Pues bien, considero que participar en un tour organizado para visitar Christiania hace que se tomen a los habitantes como monos de feria, creando todo un entramado de negocio al margen de un estilo de vida que, precisamente, está en contra del capitalismo. Si fueran los propios habitantes quienes enseñaran su ciudad, me parecería estupendo pero que, empresas o particulares organicen  un tour donde, desde un punto de vista distorsionado, se va a dar una versión quizás algo deteriorada de lo que es Christiania y de cómo nació, no me parece la forma más correcta de actuar como invitado en lo que ellos consideran su hogar. Es decir, si te sientes más segur@ yendo con un tour, adelante, es muy lícito pero, desde mi punto de vista, los habitantes de Christiania son como tú y como yo por lo que no considero que deban tratarse como animales de feria o montar un circo alternativo para atraer turistas sedientos de morbo.

Y al margen de drogas y paseos… ¿qué más puedo hacer?

Existen varias casas y edificios reconvertidos en galerías de arte y zonas de interacción artística donde, de forma espontánea, puedes encontrarte con clases de danza, taichi, yoga, cursillos sobre reciclaje, o clases de pintura. Es peculiar el hecho de que, en su interior, exista una especie de supermercado ecológico donde, al margen de comida, puedes encontrar todo tipo de artilugios para mantener al día tu huerto. Como digo, las extravagancias se dan la mano en Christiania.

Asimismo, una de las entradas cuenta con una pequeña plazoleta donde hay algunos puestos de artesanía. Puedes llevarte un souvenir de la ciudad o, como en mi caso, una sudadera con un mensaje muy inspirador y que es, en realidad, el lema de la ciudad: real eyes realize real lies, los ojos que miran de verdad descubren las verdaderas mentiras. Frase contundente, vacía de prejuicios, tal y como debería ser tu visita a la ciudad libre de Christiania.

Copenhague (foto propia)

¡Me apunto! ¿Puedes recomendarme algo más sobre Copenhague?

¡Claro! Una de mis primeras entradas que, rápidamente, se convirtió en una de las leídas ha sido esta sobre cómo llegar desde Copenhague a la vecina Malmö, en Suecia, a través del puente sobre el canal de Øresund. Asimismo,  puedes conocer mi experiencia en uno de los mejores free tours en los que he participado, y no te olvides echar un vistazo a todo lo que necesitas saber para organizar tu excursión de un día al castillo de Frederiksborg. Conoce más sobre la incineradora de residuos de la capital danesa o descubre alojamientos a buen precio en pleno Copenhague.

Por último, ten en cuenta que Christiania está prácticamente al lado del Nyvhan por lo que apenas dista unos diez minutos caminando, sin pérdida. Si por lo que sea necesitas tomar el metro, la parada más cercana es la de Christianshavn.

No te olvides visitar  la zona de los canales (foto propia)

Espero que te haya servido esta entrada para organizar tu visita a la mágica Copenhague. Recuerda que si quieres conocer más sobre algún punto o tienes alguna duda, puedes escribirme en el apartado Comentarios que encontrarás más abajo.

Recuerda que las opiniones aquí vertidas son fruto de experiencias propias y en ningún objeto de promoción. Las fotos son propias, así como su edición, y su uso sin mi consentimiento puede derivar en conflictos por derechos de autor. Sígueme en redes sociales para estar al tanto de las últimas novedades:

¡Nos leemos!

   
Salir de la versión móvil