OPINIÓN | Q Factory Hotel (Amsterdam)

La Semana Santa ha terminado y toca volver a la rutina. Pero nada mejor para sobrellevar la (corta) depresión post-vacacional que dejaros mi opinión sobre el hotel donde me he hospedado en Amsterdam: el Q-Factory. ¿Hablamos sobre él?

Quiero ir a Amsterdam pero es tan caro…

Esa fue una de las primeras cosas que me di cuenta cuando estaba buscando alojamiento en Holanda: sus precios son desorbitados y cualquier pensión o alojamiento tipo hostel se dispara, llegando a alcanzar precios similares a hoteles de tres, y hasta cuatro, estrellas en España.

Por eso, después de mucho mirar en Booking, al final me decanté por un hotel un poco alejado del centro antes que dormir en un hostel compartiendo habitación con otras personas. Así encontré Q-Factory.

Vista de los exteriores desde la habitación (foto propia)

La verdad es que por fotografías parecía espectacular: un hotel de diseño, con decoración minimalista y juegos de luces indirectas así como un ambiente muy juvenil e indie. Poco después comprendí que este hotel es un espacio multidisciplinar.

Para entendernos, es como la academia de Operación Triunfo, pero en la vida real. Cuenta con cuatro plantas de alojamiento tipo hotel, pero las plantas inferiores sirven como locales de ensayo y tiendas con todo tipo de artículos relacionados con la música. El sótano, por su lado, es una sala de conciertos.

¿Sala de conciertos? ¿Dentro de un hotel?

Y pensarás » a ver quién duerme». Bueno, puedes creerme que se duerme a pierna suelta. No se escucha absolutamente nada de los conciertos (durante mi estancia hubo varios) y lo máximo es un pequeño zumbido provocado por las vibraciones; pero en ningún momento se hace molesto o hace que no puedas descansar. Es cierto que mi habitación se encontraba en la tercera planta pero, aún así, se nota que el edificio está perfectamente insonorizado.

¿Y qué tal las habitaciones?

Como prácticamente todos los hoteles europeos, destaca el uso de materiales de distintas texturas con predominio de la madera al natural. La habitación es cálida, con numerosas ventanas que invitan a quedarse a primera hora en la cama mullida mientras los rayos de sol van entrando poco a poco por alguno de los ventanales. ¡Qué delicia!

Habitación (foto propia)

La habitación cuenta con un minibar pero sin nada en su interior. Existe un pequeño escritorio pero, en cambio, no hay armario. Si te quedas varios días, como fue mi caso, tendrás que utilizar un par de perchas y dejar la ropa doblada ya sea en el interior de tu maleta o en el alféizar interior de la ventana.

Dato curioso: llegar hasta tu habitación será un camino largo, muy largo. La distribución del hotel hace que para pasar de un lado a otro tengas que dar un rodeo completo, lo cual no deja de ser algo chocante.

Interminables pasillos, aunque con buena decoración (foto propia)

Háblame del baño

Pues realmente hay mucho que contar. De tamaño medio, tirando a grande, destaca la decoración en negro total. Suelo y paredes son de azulejo negro, lo que no deja de ser algo peculiar… más teniendo en cuenta que los techos (tanto de la habitación como del propio baño) son de hormigón… estilo industrial llevado al extremo.

Como dato a favor, el calentador de toallas es realmente útil y funciona. Nunca me había encontrado uno, ni siquiera en hoteles de alta categoría en los que he podido pasar varias noches, por lo que me ha parecido una novedad más que agradable el hecho de salir de la ducha y poder secarte con la toalla calentita.

Calentador de toallas y vista de la ducha (fotos propias)

Pero, ¡ay la ducha!. Aunque con presión, destaca (y para mal) el olor a tubería que desprendía. El primer día pensé que se trataría de algo puntual pero no, es una cosa que persistió durante toda la estancia. No se hace insoportable (y hay que entender que Amsterdam está construida bajo el nivel del mar) pero me parecería más apropiado que la dirección del hotel pusiera pequeños difusores de ambientador o similar; otra posibilidad sería, por supuesto, arreglar el sistema de cañerías y tuberías.

Asimismo, uno de los días, el personal de limpieza no se percató que nuestro bote de gel-champú estaba vacío por lo que tuvimos que arreglarnos con el jabón de manos. Se comentó en una nota y al día siguiente quedó solucionado aunque me deja una sensación de despreocupación por parte de los chicos o chicas que llevan la limpieza de las habitaciones.

¿Alguna cosa más que destacar?

Al margen de todo lo anterior mencionado, poco más que decir. Como veis no es para nada un hotel convencional.

Destaca el precio de la habitación: tan «sólo» 300€ por una doble tres noches. Sé que es un precio desorbitado pero, comparado con la media de los alojamientos de Amsterdam, es francamente barato. Pensiones, hostales y hostels pueden rozar esos mismos precios en temporada alta.

Destacar asimismo que no hace falta que desayunéis en el hotel. Por lo que he visto en fotos en la web TripAdvisor es desayuno tipo buffet pero sin grandes pretensiones; existen cafeterías muy coquetas e instagrameables por los alrededores, como Baking Lab, a un minuto a pie del hotel, con unos deliciosos croissants así como completos cuencos de yogur con frutas y cereales.

Fantástico desayuno en Baking Lab (foto propia)

Espero que os haya gustado esta nueva entrada sobre Amsterdam. Prometo que en muy poco tiempo tendréis nuevas sobre las diferentes visitas que he realizado, aunque ya tenéis disponible mi visita a la región de Waterland, con visita a una quesería y a los preciosos pueblos de Edam, Volendam y Zaanse Schans. Os dejo el link: Hop on Hop off: Volendam, Edam, molinos, quesos y mucho más

Asimismo, si estás pensado reservar tus próximas vacaciones, te dejo un link con descuento de 15€ en tu próximo viaje a través de Booking.com. A ti el viaje al hacer la reserva te cuesta lo mismo y a la vuelta de tus vacaciones te devolverán 15€; con ello, contribuyes a mantener vivo este blog ya que ninguna de las opiniones aquí vertidas son fruto de patrocinios o promociones siendo, en definitiva, experiencias propias y totalmente independientes. https://booking.com/s/79_6/javall68

Recuerda que puedes seguirme en redes sociales:

– Facebook (Mochila de Cromo)

– Instagram (@mochiladecromo) ¡¡donde ya somos más de 1000 mochileros!!

– YouTube (@mochiladecromo)

Nos leemos!

3 comentarios sobre “OPINIÓN | Q Factory Hotel (Amsterdam)

Deja un comentario