¿Pensando en una escapada a la capital de la música? Si tienes unos días libres durante el invierno y piensas que Viena se paraliza durante esta estación, continúa leyendo y descubrirás todo lo que la capital austríaca puede ofrecerte durante sus meses más fríos.
¿Es realmente la mejor época para viajar?
Pues aunque parezca lo contrario, probablemente sí. En el siguiente post te comento alguna de las opciones que puedes disfrutar y realizar en tu escapada, así como actividades exclusivas que solo ocurren durante el invierno. Viena no se apaga durante los meses fríos sino que traslada todo su ambiente y elegancia a los majestuosos salones y salas de conciertos.
Una de las dudas que me asaltaron cuando organicé mi escapada invernal era que, en apenas 3 días, me aburriera dada la falta de horas de luz, el frío y la escasa actividad cultural más allá de lo relacionado a la Navidad; todo lo contrario, debo reconocer que estaba confundido.
Ante el actual panorama sociosanitario, se hace casi imprescindible que vayas protegido. Así, un seguro de viajes te facilitará cualquier percance tanto en Viena como en todo el mundo. Nosotros siempre viajamos seguros con MONDO, la compañía líder en seguros de viajes y la más utilizada por travel bloggers. Tiene cobertura COVID así como atención 24 horas, 7 días a la semana, sin necesidad de adelantar ningún pago. Si contratas a través de este enlace, te llevarás un fantástico 5% de descuento por ser lector o lectora de nuestro blog.7 tips para tu visita a Viena durante el invierno
Y es que como te digo, la ciudad no se para durante estos meses. A continuación te dejo un listado con 7 consejos o tips sobre qué hacer y ver en Viena. Además, alguna de estas cosas solo las podrás hacer durante más fríos, así que no lo dudes y comienza a buscar vuelos para tu próxima escapada.
1. Visitar el palacio de Schönbrunn nevado
Considerado el Versalles vienés, el palacio de verano de la familia de los Habsburgo no deja indiferente a nadie, y mucho menos en invierno. Si bien es cierto que los jardines están un poco más descuidados y que no es posible apreciar la frondosidad y decoración de los mismos, visitar Schönbrunn en invierno debe ser una opción a considerar en tu escapada. De otra forma, no verías los enormes bosques que rodean el palacio nevados, el frío característico y las preciosas vistas desde Gloriette, con todas las fuentes y pequeños lagos helados.
Puedes hacer la visita completa con esta excursión con guía oficial. Si quieres conocer más sobre el palacio de verano de Sissi, te dejo aquí mi artículo al completo. 
2. Época de bailes y conciertos
Como os dije antes, Viena no se para porque en la calle estemos bajo cero; en absoluto. Durante los meses de Enero y Febrero, pasada la época de los mercados navideños, llega a la capital austríaca su buque insignia: los bailes y la música. Las diferentes salas y salones, donde interpretaron sus obras maestros como Mozart o Strauss, abren sus puertas para acoger galas y eventos donde poder transportarse a finales del siglo XIX.
Una buena opción, y a un precio más que considerable, es visitar la web del Musikverein. Gracias a la cuenta en Instagram @viennatips, estos chicos portugueses me recomendaron la programación del lugar donde se celebra el famosísimo Concierto de Año Nuevo. En mi caso, la buena suerte hizo que pudiera disfrutar de un concierto a muy buen precio. Descúbrelo todo aquí.
3. Realiza un Free Tour
Cuando las temperaturas no acompañan parece que uno prefiere quedarse en casa calentito, pero si estás visitando una ciudad o lugar nuevo debes salir y conocer; ya habrá tiempo para resguardarse. Por ello, una de las mejores cosas que puedes hacer es realizar un Free Tour.
En mi caso, reservé con la web de Civitatis cuyos proveedores son Good Vienna Tours. He de decir que la última vez que realicé un tour, en Oporto, me decepcionó bastante dado el poco rigor de nuestro guía pero, en este caso, enhorabuena a Anne-Marie por hacernos pasar dos horas fantásticas. Ha sido una idea estupenda poder conocer los entresijos de la capital, descubrir anécdotas, secretos… y todo ello sin perder la sonrisa, atendiendo y respondiendo a todas nuestras preguntas. Te dejo aquí el enlace a la opinión sobre el Free Tour.
4. Visita el Ice World
Seas o no un amante de los deportes de invierno, y en concreto, del patinaje sobre hielo, deberías acercarte hasta el Ice World de Viena. Frente al majestuoso ayuntamiento de la capital (mención aparte, impresionante edificio que gana más aún durante la noche) y en pleno anillo vienés, se encuentra esta enorme pista de hielo. Y me diréis, bueno…. una pista de hielo sin más. Lo siento pero no: jamás había visto cosa parecida.
La pista del Ice World Vienna tiene dos plantas y aprovecha los caminos que componen el parque donde se ubica para hacer «calles» de hielo, es decir, mientras patinas puedes ir haciendo un recorrido por diferentes zonas del parque, contemplar el ayuntamiento desde su zona alta o disfrutar de una pequeña pista anexa donde, por las tardes, se celebran pequeños campeonatos de curling.
Los más foodies pueden degustar la comida típica austro-germana, donde no falta el codillo, el vino caliente y las enormes salchichas, todo regado con cerveza y vino de la zona.
5. Vive la Viena más auténtica
¿Quieres conocer la auténtica Viena? Date un paseo por el distrito 2, en la otra orilla del Danubio, o por el distrito 7, al otro lado del anillo.
El distrito 2 se caracteriza por ser el centro real de Viena, donde vive y se hace vida y donde puedes ver el ir y venir de los vieneses; un lugar perfecto donde pararte a tomar un café o comprar productos de la zona sin los abusivos precios del centro turístico.
En cambio, el distrito 7 está al oeste del barrio de los museos, y destaca por una enorme avenida comercial donde encontrar marcas como Zara, H&M y Foot Locker, aunque también encontrarás tiendas de barrio y una serie de pequeños comercios dedicados a productos típicos como el vino o el queso, así como varias tiendas vintage. Además, en el barrio abundan los restaurantes étnicos de múltiples nacionalidades, así como varios restaurantes destacados de comida local. Sin duda, el plan perfecto para pasar la tarde y tomar el pulso (no turístico) a la ciudad.
6. Conoce la historia de Viena a través de sus museos y palacios
Si, de repente, el tiempo se pone crudo lo mejor será resguardarse en uno de los muchos museos con los que cuenta la ciudad. Viena es un lugar histórico, neoclásico, donde cada edificio, por simple que sea, parece una obra de arte. Además, en el casco histórico se encuentran los principales museos como Albertina o el Museo Judío, así como el Palacio de Hofburg (residencia de invierno de Sisi) junto a la Escuela Española de Equitación y la Ópera.
7. O disfruta de un café calentito
Pero la otra alternativa al mal tiempo es disfrutar de la cultura de café y tarta, tan expandida por Europa a través del hygge danés, que en Viena no se queda, para nada, corta. Los vieneses disfrutan en sus cafés con mezclas y composiciones que van más allá de los simples capuchinos, con cuidados postres como el apfelstrudel, un rollo relleno de compota de manzana, o la famosa Tarta Sacher. Seguro te preguntas si merece la pena ir a comer la tarta al hotel donde se creó, así que te dejo el enlace a mi entrada para que tomes tu propia decisión Opinión | Hotel Sacher y su tarta, ¿un fraude?
Pues parece que se puede hacer mucho
Así es. Os lo dije al principio: Viena no para en invierno. La agenda cultural es amplia y abarca multitud de gustos, desde música clásica hasta danza o teatro, pasando a las opciones más alternativas (y es que Viena no tiene que relacionarse ya con conservador). Además, eventos exclusivos del invierno como el Ice World hacen que merezca la pena una escapada a la capital al otro lado de los Alpes. Si buscas alojamiento en la ciudad echa un vistazo al hotel donde me hospedé, y no te olvides de hacer una visita a los tres restaurantes imprescindibles de la capital austríaca.
Si tienes tiempo, también puedes acercarte hasta la zona de Alta Austria, cerca de Baviera y a unas tres horas en tren desde Viena, para disfrutar del pueblo más conocido a orillas de un lago de toda Europa. Encuentra alojamiento a buen precio en el propio Hallstatt aquí.
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